Hola a todos,
El título es una frase de un fragmento del libro » ANATOMÍA DE LA CREATIVIDAD» Editorial FUNDIT. Escola Superior de Disseny ESDi. Colección DesignKnowledge&Future. (Pag. 24). El Autor es Llorenç Guilera Agüera, ingeniero industrial y doctor en Psicología, especializado en la docencia e investigación de la creatividad, la inteligencia y las competencias directivas.
Llorenç Guilera dice que a pesar de que todos poseemos capacidades creativas bastante elevadas al nacer, la educación recibida puede favorecerla o, por el contrario, inhibirla hasta hacerla desaparecer.
Señala que hay que educar la creatividad, que el sistema educativo de un país debería estar enfocado a educar y promover la creatividad de las personas, desde la infancia hasta los niveles universitarios más altos y no a tener ciudadanos conformistas y obedientes que castran cualquier atisbo de creatividad, porque la creatividad es, por naturaleza, inconformista y divergente.
Destaca que las personas creativas encuentran en el entorno cultural que les rodea estímulos de todo tipo para el desarrollo de pensamientos originales, enriqueciendo el inventario de soluciones creativas y ayudando a dar más calidad de vida a la sociedad.
Entiende que un país que pretende progresar, está obligado a velar por la inclusión del cultivo de la creatividad en todos los niveles educativos. No basta con educar las aptitudes de los que escogen carreras de Bellas Artes o Diseño.
Llorenç, habla de que debemos implantar una educación basada en talleres prácticos, que combine el pensamiento creador originado en el aula con su aplicación en el mundo real. Desde la más tierna infancia los alumnos pueden y deben aprender a pensar con originalidad, a saber que hay mucho por inventar, que todo lo que nos rodea es susceptible de ser mejorado, que no tenemos que mostrarnos pasivos y conformistas frente a las molestias cotidianas de los objetos, herramientas y servicios que nos rodean.
Y cuenta esta anécdota como ejemplo para poner de relieve hasta qué punto es necesaria una educación en creatividad.
Un presumido joven que se encuentra en un autobús lleno hasta los topes se toma la molestia de explicarle a un señor mayor sentado a su lado, por qué le es imposible a la vieja generación comprender a su generación.
Usted creció en un mundo diferente, realmente bastante primitivo -dice en voz lo suficientemente alta para que lo escuchen alrededor-. Los jóvenes de hoy hemos crecido con televisión, Internet, aviones jet, viajes al espacio, el hombre caminando en la luna. Nuestras sondas espaciales han visitado Marte… Tenemos naves con energía nuclear y coches eléctricos y de hidrógeno. Ordenadores que procesan datos casi a la velocidad de la luz… y muchísimo más.
Después de un breve silencio el señor mayor le responde: -Tienes razón, hijo. Nosotros no tuvimos esas cosas cuando éramos jóvenes… ¡así que las inventamos! Ahora, arrogante jovencito, dime ¿qué estás haciendo tú para la próxima generación?
En Imagina, a través de nuestros talleres, desarrollamos y estimulamos esa capacidad creativa innata en los niños y lo hacemos a través de un aprendizaje activo, donde ellos son los protagonistas. Para que, como dice Llorenç Guilera, aprendan a pensar con originalidad, a saber que hay mucho por inventar y que todo lo que nos rodea es susceptible de ser mejorado.
Saludos!