Los colegios no son empresas

Recientemente se ha publicado en el Mundo el Ranking de los 100 mejores Colegios de España y según el puesto, cada colegio celebra su posición como un éxito y más si el puesto está entre los primeros. Es que es motivo de celebración la mediocridad del puesto décimo. Y yo me pregunto, ¿los colegios son empresas? ¿qué significa estar ahí?, ¿tiene tu hijo el éxito garantizado, si asiste al mejor de la lista?, ¿se puede generalizar, como si fueran botes de tomate frito?. Para mí los colegios no son empresas.

La Educación está cambiando y los profesores son el impulso de este cambio. Después de leer el artículo y los 27 criterios que utilizan para elegir a los 100 mejores Colegios, tengo claro que para mí el éxito de un colegio, no son los premios o menciones que reciba, ni los idiomas que oferta, ni las calificaciones de sus alumnos, ni la cantidad de tutorías que dan por alumno, ni el ratio, ni el material informático que tenga o las instalaciones. Sin duda el éxito reside en los profesores, de la misma forma que el éxito de una operación reside en el médico. Para mí el Colegio es un contenedor, donde lo verdaderamente importante son los profesores. Tu hijo o hija, como alumno o alumna, tendrá más o menos suerte según el profesor que le toque.

Así, la experiencia de los alumnos son diferentes según el profesor. Su pasión por el trabajo, su creatividad, las ganas de ser mejor, si le gustan los niños, porque, aunque parezca increíble, los hay a los que no le gustan, su nivel de paciencia, el feeling que tenga con el alumno y por supuesto, cómo es el Alumno. Si es un alumno tranquilo, o es un niño movido o distraído. Son muchísimos los valores que intervienen en esta ecuación.

Por todo esto, creo fundamental para el éxito en un aula, conocer la manera en que adquiere los conocimientos un alumno como ser individual, con sus pros y sus contras. Cada niño es diferente, lo vemos en casa con hermanos educados de la misma manera, con la mismas reglas y los mismos padres. Pero en lo colegios normalmente les hacen aprender de la misma forma, por lo que surgen alumnos que no puedan seguir la clase, o que necesiten refuerzo en casa. Siempre ha habido alumnos que han necesitado una mayor estimulación para conseguir los objetivos o alumnos que les cuesta tener un hábito de estudio. Hay todo tipo de de alumnos, ni mejores ni peores, solo diferentes y es el reto y la responsabilidad del profesor captarlos a todos y cada uno.

«Es significativo que el último libro de Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía, se titule La creación de la sociedad del aprendizaje, y dedique sus primeros capítulos a hablar de pedagogía.»

Como decía mi tía Margarita Piñero Carrión “a los profesores les tiene que encantar su profesión». Lo importante es saber transmitir tu conocimiento y os digo que, sin duda ella lo hacía de forma increíble. Un buen profesor no es el que sabe más , sino el que mejor transmite y además llega a todos, porque sabe hacerlo de forma individualizada, para los diferentes y únicos alumnos de su aula. Precisamente, lo bueno de nuestra sociedad es que somos diferentes y pensamos diferentes.

Aunque en todos los colegios existen buenos profesores, autodidactas, con mucha vocación e intuición para transmitir y enseñar a sus alumnos según cada uno, no son la mayoría. Necesitamos que los profesores sean la élite de esta sociedad, sencillamente por responsabilidad, porque tienen en sus manos el futuro.

La educación está cambiando, el futuro laboral de nuestros hijos es bastante incierto. Si eres un colegio tienes la obligación de buscar siempre lo mejor para tus alumnos, sin conformarte, para ello es importante que los docentes tengan la FORMACIÓN, las GANAS DE APRENDER, PACIENCIA, ILUSIÓN, PASIÓN, CREATIVIDAD y la VOCACIÓN NECESARIA PARA ENTENDER A CADA ALUMNO, RESPETAR Y FACILITAR SU PROPIO ACCESO AL CONOCIMIENTO. Porque los colegios NO son empresas, o no deberían…

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